Día 1 (07/03/2014) - Barcelona ➞ Londres
Salida de Barcelona
El viaje a Londres lo hicimos con nuestros amigos Jordi, Júlia, Yaiza, Oscar y Xavi, era la primera vez que hacíamos un viaje al extranjero con amigos. El avión salía el viernes por la tarde y algunos de nosotros trabajábamos. Sergio era el que salía más tarde pero trabajaba en Barcelona. Pasamos a buscarlo a las 15:30 por su trabajo para ir a comer cerca del aeropuerto. Paramos en un centro comercial y comimos en un restaurante de la cadena "La Tagliatella". Después de comer fuimos a un parking que hay cerca del aeropuerto, donde se puede dejar el coche mientras estas de viaje. Éramos 7, de modo que íbamos en dos coches y compartíamos los gastos del parking. Para llegar al aeropuerto tenían un servicio de minibús desde el parking que obviamente utilizamos.
Solo pasaríamos dos noches en la capital británica, así que no necesitábamos mucho equipaje, llevábamos una maleta pequeña cada uno. No tuvimos que facturar las maletas porque habíamos tenido en cuenta las normas de Vueling para el equipaje de mano. Íbamos bien de tiempo y aprovechamos para tomar un café en el aeropuerto, mientras esperábamos a que nos llamasen para embarcar.
Primera noche en Londres
El vuelo duró algo más de dos horas para llegar al aeropuerto de Gatwick. Recogimos nuestro equipaje de mano y salimos a la calle. Fuera estaba esperándonos el taxista que habíamos contratado para que nos llevase hasta el hostal. El aeropuerto de Gatwick está a 45 kilómetros de Londres. Había bastante tráfico y el recorrido se nos hizo muy largo, tardamos otras dos horas aproximadamente para llegar hasta nuestro alojamiento. El hostal era un típico B&B (Bed and breakfast) británico. Hicimos el check-in y preguntamos si servían cenas, pero nos dijeron que no tenían cocina y que solo servían desayunos. Dejamos las maletas en la habitación y fuimos a buscar un restaurante donde poder cenar.
Caminamos un poco por la ciudad hasta que llegamos a un pub donde podríamos cenar. Pedimos unas pizzas para compartir y unas cervezas. En el pub tenían billar y dardos, pero lo que más nos llamó la atención fue que tenían una jukebox. Esto no es más que una máquina, donde por un módico precio, podíamos elegir 3 canciones para que sonaran en el bar. Hicimos un par de rondas de canciones mientras cenábamos para seleccionar la música a nuestro antojo. Estuvimos un rato más después de cenar, pero empezaba a hacerse tarde y volvimos a nuestro B&B.
Pub
De vuelta al hostal vimos los típicos autobuses y taxis londinenses. Íbamos a estar poco tiempo en Londres, pero parecía que no nos íbamos a perder nada típico de la ciudad. En la parte baja del hostal tenían bar y excepto Sergio que tenía mucho sueño, el resto nos quedamos tomando una copa antes de ir a dormir. Al día siguiente había que levantarse pronto para aprovechar el día y ver lo máximo de la ciudad.
Autobús
Taxi
