Día 12 (15/05/2022) - Búdardalur ➞ Stykkishólmsbaer ➞ Kirkjufell y Kirkjufellsfoss ➞ Hellissandur
Búdardalur
Despertamos en este camping de Búdardalur que no nos había gustado. Preparamos el desayuno y comimos de nuevo dentro de la camper, en el exterior hacía mucho frío por la mañana. Mientras recogíamos las cosas antes de salir e íbamos al baño, nos cruzamos por el camping con Diego. Habíamos pasado la noche de nuevo en el mismo camping. Pensábamos que ya no lo volveríamos a ver porque el volvía a España en un par de días, sin embargo volvíamos a encontrarnos. Comentamos un poco los planes que teníamos para acabar el viaje a Islandia y nos despedimos porque ahora sí seguramente ya no volveríamos a vernos.
La península de Snaefellsnes es bastante grande y aunque es posible recorrerla en un día, pensamos que sería mejor dedicarle dos días. Hay muchas visitas en esta porción de Islandia y para hoy queríamos recorrer la zona norte. Durante este recorrido queríamos visitar el pueblo de Stykkishólmsbaer, la montaña Kirkjufell, la cascada Kirkjufellsfoss y llegar hasta el faro de Svörtuloft. No perdimos mucho tiempo en el camping ya que en total teníamos que recorrer cerca de 200 kilómetros. El paisaje hasta nuestra primera parada era espectacular y nos detuvimos en más de una ocasión para verlo con tranquilidad.
Carretera de Búdardalur a Stykkishólmsbaer
Stykkishólmsbaer
La primera visita de hoy era el pueblo de Stykkishólmsbaer, considerado como el pueblo más bonito de Islandia. Lo primero fue ir hasta la iglesia que está situada en una zona elevada, desde donde se podía ver todo el pueblo. Todo el entorno es muy bonito y entendimos que esté considerado como el pueblo más bonito del país, aunque a nosotros nos había gustado más algún otro pueblecito que habíamos visitado durante el viaje. Pasamos unos minutos disfrutando de las vistas y contemplando como son las casas y sus jardines.
Stykkishólmsbaer
Stykkishólmsbaer
Después de unos minutos decidimos ir hacia el muelle. Además del puerto, aquí hay una gran roca donde se sitúa el faro. Recorrimos el muelle y llegamos hasta la roca para subir por las escaleras que llevan a la cima. Llegamos hasta el faro desde donde se podía ver de nuevo el pueblo. Mientras estábamos arriba notamos que empezaba a llover y volvimos a la furgoneta para continuar con el recorrido del día.
Stykkishólmsbaer
Stykkishólmsbaer
Campo de lava de Berserkjahraun
De camino a nuestro siguiente destino hicimos una parada que venía de camino. El campo de lava de Berserkjahraun es uno de los muchos que hay en Islandia y uno de los que más nos gustó. Una gran zona llena de rocas volcánicas de color negro, cubiertas por una capa de musgo verde. El contraste de colores es muy bonito y nos quedamos un rato contemplando las vistas.
Campo de lava de Berserkjahraun
Kirkjufell y Kirkjufellsfoss
Cuando estábamos llegando a nuestro siguiente destino nos detuvimos para ver la cascada Grundarfoss. Tuvimos que hacerlo desde la entrada a un camino privado. El camino estaba cortado y no se podía llegar con la camper hasta la cascada. No era una de las visitas más importantes, así que nos conformamos con verla de lejos. También vimos desde aquí el pueblo de Grundarfjördur, con la montaña Kirkjufell de fondo, nuestra próxima visita.
Grundarfoss
Grundarfjördur
Cruzamos el pueblo de Grundarfjördur y llegamos al parking de la cascada Kirkjufellsfoss. Había una cámara en la entrada que leía la matrícula y una máquina para pagar el parking. Fue un poco raro porque la máquina no estaba en funcionamiento y en cambio pedían entrar en una web para realizar el pago. Lo raro era que no pedían la matrícula al hacer el pago y no sabíamos como lo hacían para saber quien pagaba y quien no. Por si acaso, pagamos los 700ISK que valía el parking. Vimos que había gente que no pagaba el parking, pero no queríamos jugárnosla a una posible multa, que en Islandia son bastante elevadas.
Primero vimos la montaña Kirkjufell que ya desde lejos nos había gustado mucho. Ahora de cerca no podíamos dejar de contemplarla. La montaña es de origen volcánico, tiene una altitud de 463 metros y una curiosa forma cónica. Además, esta zona fue escenario de la serie Juego de Tronos. Esta montaña es una de las visitas más importantes de la península y el lugar más fotografiado del país.
Kirkjufell
Kirkjufell
Desde el parking hay un pequeño camino que llega hasta la cascada Kirkjufellsfoss. Se puede bajar por ambos lados de la cascada y cruzarla por encima por un puente. Descendimos primero por el lado más cercano al parking y después cruzamos el puente para bajar por la otra orilla. Las vistas desde ambos lados son impresionantes. La cascada es pequeña, pero la imagen combinada con la montaña Kirkjufell de fondo es muy bonita. Sabíamos que era una de las últimas visitas imprescindibles del viaje y disfrutamos unos buenos minutos de las vistas. El día seguía un poco inestable y volvía a llover un poco, así que con la visita completada volvimos a la furgoneta para continuar con la ruta de hoy.
Kirkjufellsfoss
Kirkjufell y Kirkjufellsfoss
Skardsvík Beach
Para hoy teníamos la duda de si dormir en la zona norte de la península o bordearla por el oeste y dormir en el sur. Pasamos por delante del camping de Hellissandur y vimos que tenía buena pinta. Así que decidimos que pasaríamos la noche en este lugar. Por ahora, quisimos llegar hasta el extremo más occidental de la península. Dejábamos para el día siguiente la carretera que bordea el oeste y el sur de la península.
Nos desviamos de la carretera principal que rodea la península de Snaefellsnes para llegar a la playa Skardsvík. Para nuestra sorpresa nos encontramos de nuevo con Diego. Hablamos de lo que habíamos visto durante el día de hoy y nos despedimos definitivamente ya que él se iba al sur de la península y dormir lo más cerca de Reykjavík, ya que su avión salía al día siguiente por la noche.
Por nuestra parte bajamos a la playa para hacer la visita. A diferencia de las que habíamos visto hasta el momento en Islandia, esta playa no era de arena negra. Aunque las rocas que había distribuidas en los laterales de la playa y los acantilados que la rodeaban eran de color negro. Paseamos un poco por la playa y nos quedamos un rato junto a unas grandes rocas volcánicas.
Skardsvík Beach
Skardsvík Beach
Svörtuloft lighthouse
Para acabar con las visitas de hoy, seguimos por la carretera secundaria hasta el faro Svörtuloft. El faro es llamativo gracias a su color naranja, pero lo impresionante eran sus vistas. Aquí conocimos a otra pareja española. Hablando con ellos sobre el viaje, nos dijeron que habían hecho la excursión para avistar ballenas en Húsavik. Ellos la hicieron dos días después de lo que nosotros teníamos planeado y el guía les dijo que habían sido los primeros de la temporada en ver ballenas. De modo que si hubiéramos hecho la excursión igualmente no hubiéramos visto ballenas. Nos consoló un poco saber que hubiéramos pagado una excursión muy cara para no ver casi nada. Antes de irnos, disfrutamos un poco de las vistas que hay desde el mirador del faro, desde aquí se veían unos increíbles acantilados y un gran número de aves.
Svörtuloft lighthouse
Svörtuloft lighthouse
Hellissandur
Al dividir las visitas de la península de Snaefellsnes en dos días, íbamos bien de tiempo y llegamos al camping de Hellissandur temprano. El camping se encontraba en un campo de lava y las instalaciones estaban muy bien. Las zonas de parking eran amplias y el edificio con duchas, baños y cocina era nuevo. La cocina no era la más grande de las que habíamos tenido, pero lo suficiente para la gente que éramos en el camping. Además, tenían un parque infantil y Liam pudo jugar un rato.
En la cocina solo había un grupo de chicos con sus portátiles y pudimos usar los fogones sin problema para preparar la cena. Además, había otras dos mesas y pudimos cenar muy cómodos. Mientras preparamos la cena, apareció el dueño del camping. No tienen recepción y se pasan por las instalaciones un par de veces al día para cobrar. Pagamos 3400ISK, unos 24,88€ al cambio, por la furgoneta y dos adultos por una noche. Después de cenar, pasamos un rato en la mesa jugando con Liam haciendo su puzle que compramos unos días atrás. Cuando empezó a ser tarde volvimos a la camper para dormir. Al día siguiente teníamos un buen número de visitas y muchos kilómetros por recorrer, así que había que estar descansados.
