Imprescindibles de Jordania
Jordania es un país pequeño pero con mucho por visitar y que cuenta con un pueblo muy amable y hospitalario. Por aquí han pasado a lo largo de la historia varios imperios, persas, otomanos, romanos y bizantinos entre otros. Es un lugar donde se han desarrollado varias culturas y religiones, por eso podemos encontrar diversos tipos de ruinas arqueológicas, castillos o poblados antiguos. Pese a tener un territorio mayoritariamente desértico, ofrece muy buenos y fascinantes paisajes. Aunque se encuentra rodeado de países en una situación inestable, es un lugar en paz y que se puede recorrer por libre, donde el viajero puede estar seguro.
Indudablemente la mejor visita del país es Petra, una de las 7 maravillas del mundo, y es el motivo principal que lleva a mucha gente a visitar Jordania. Pero a lo largo de su territorio hay muchas otras cosas por visitar, pasando por castillos de diferentes imperios y que no hacen más que enriquecer la historia de la zona. También alberga Wadi Rum, uno de los desiertos más bellos en los que hemos estado, o el Mar Muerto donde se puede vivir la experiencia única en el mundo de flotar en sus aguas. El imperio romano pasó por estas tierras y dejaron su huella en varias ciudades, donde se pueden visitar algunos de los mejores restos arqueológicos. Jordania tiene muchos puntos religiosos importantes y es que alberga lugares bíblicos de relevancia. Hemos realizado una selección de las que son para nosotros las mejores 10 visitas que realizar en este país. Si queréis saber más sobre nuestras aventuras por Jordania podéis visitar nuestro diario de Viaje a Jordania, Israel y Territorios Palestinos en 16 días.
10. Castillos del desierto
Al este de Ammán se extiende el desierto hasta los países vecinos. Se puede realizar una visita de mediodía para ver algunos de los castillos que hay por la zona. El Qasr Al Azraq es el más conocido y visitado, fue utilizado por Lawrence de Arabia durante la revolución árabe. El Quasir Amra está considerado como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, lo más importante son los frescos con diversas escenas en techos y paredes. Por último está el Qasr Kharana, el más grande y mejor conservado de los tres, tiene una estructura cuadrada y más clásica, parecida a los castillos medievales.
Qasr Al Azraq
9. Monte Nebo y Betania
El Monte Nebo es el lugar donde, según la Biblia, Moisés vio la Tierra Prometida. En la cima de sus 800 metros de altura se encuentran los restos de una iglesia bizantina del siglo IV, donde pueden verse algunos mosaicos. Sobre estas ruinas se edificó una nueva iglesia por los franciscanos durante el siglo XX. Desde este lugar hay unas vistas impresionantes, pueden verse el río Jordán, el Mar Muerto y dicen que en días claros hasta Jerusalén.
La Tierra Prometida desde el Monte Nebo
Muy cerca se encuentra Betania, el lugar donde Juan bautizó a Jesús. Para llegar hasta esta zona es necesario hacerlo con un guía ya que es zona militar y solo permiten estar durante una hora. Durante el recorrido se ve el lugar donde fue bautizado Jesús. Antiguamente el río Jordán era más ancho y en la actualidad la zona del bautismo está seco. Al final del recorrido se llega al río, que además hace de frontera con Israel, donde puede verse como al otro lado mucha gente se mete en el agua para bautizarse. También podemos ver la iglesia ortodoxa de San Juan Bautista.
8. Castillo de Ajlun
Situado a poco más de 70 kilómetros al norte de Ammán, se encuentra el castillo de Ajlun. Se construyó a finales del siglo XII por un sobrino de Saladino para defender la región de los ataques de los cruzados. También se utilizaba para proteger las comunicaciones entre el sur de Jordania y Siria, las minas de la zona y el avance del reino de Jerusalén. Para una buena defensa, el castillo se construyó con un foso de 16 metros de ancho que rodea todo el edificio. Se puede visitar en poco más de una hora y es un muy buen complemento para realizar junto a Jerash, una excursión desde la capital del país.
Castillo de Ajlun
7. Madaba y la iglesia del mosaico
Madaba, también conocida como la ciudad de los mosaicos, es una ciudad a la que hay que dedicarle una visita. Su sobrenombre se debe en gran medida a la Iglesia Ortodoxa Griega de San Jorge, donde se encuentra un mosaico del siglo VI d.c. y que representa el mapa más antiguo que se conserva de Jerusalén y Tierra Santa. Además, hay otros lugares repartidos por la ciudad donde también hay gran cantidad de mosaicos, como la Iglesia de los Apóstoles o el parque arqueológico de Madaba. También es un buen lugar que puede hacer de base para realizar una visita al Monte Nebo y al Mar Muerto.
Mapa del mosaico
6. Ciudadela de Ammán
Muchos viajeros pasan de largo por la capital de Jordania. Ammán es un buen punto de partida para una primera toma de contacto con el país y como base para algunas visitas al norte del país. Pero sobre todo porque cuenta con una ciudadela que es una muy buena visita. Hay muchos restos arqueológicos como el palacio Omeya, el templo de Hércules y un museo muy interesante. Al estar construido sobre una colina hay unas magníficas vistas de toda la ciudad. Como complemento también se puede visitar el teatro romano que se encuentra a pocos metros de distancia.
Ciudadela de Ammán
5. Castillo de Karak
En Jordania hay varios castillos, uno de los más grandes y el que más nos gustó fue el castillo de Karak, situado en la actual ciudad que lleva el mismo nombre y al cual se llega por la carretera del rey. Fue un castillo cruzado construido a unos 1.000 metros de altitud durante el siglo XII, pero posteriormente fue conquistado por Saladino y ampliado por los mamelucos. Una de las cosas que más nos gustaron fueron las galerías subterráneas, muy bien conservadas y que te transportan a la época de las cruzadas.
Castillo de Karak
4. Jerash
Cuando viajamos siempre nos gusta conocer la historia del país y Jordania tiene mucha. Por aquí han pasado varios imperios, entre ellos el romano. En Jerash se encuentra una de las ciudades romanas mejor conservadas, en gran medida porque permaneció enterrada por la arena hasta 1920. Entre los puntos más importantes están el arco de Adriano, el templo de Artemisa, la plaza ovalada, el templo de Zeus y los teatros. Jerash se encuentra a poco más de media hora de Ammán, con lo que se puede hacer una excursión en taxi o autobús desde la capital.
Jerash
3. Mar Muerto
Antes de llegar a Jordania habíamos visto cientos de fotos de gente flotando en el Mar Muerto. Pero nada como experimentarlo por uno mismo. Siempre decimos que es mejor vivirlo a que te lo cuenten o muestren en foto, y este es un claro ejemplo. Entrar en esta agua y flotar es una gran experiencia que os recomendamos que no os perdáis tanto si visitáis Jordania como Israel. Además, este lugar es el punto más bajo de la Tierra ya que está situado a 435 metros bajo el nivel del mar.
Mar Muerto
El Mar Muerto es en realidad un lago de agua salada alimentado por el río Jordán y con una concentración de sal 9 veces mayor que cualquier océano, lo que provoca que flotes cuando te tumbas sobre el agua. Eso sí, hay que tener ciertas precauciones, como la de tumbarse boca arriba y no meter la cabeza bajo el agua. Así como la gran cantidad de sal hace que flotes, también hace que sea complicado darse la vuelta una vez tumbado y que los ojos piquen de manera sobrenatural. Nosotros vimos como a un chico, que jugaba con los amigos, le cayó un poco de agua en los ojos y tuvo que ser ayudado para salir y se quejaba de lo que escocia. Todavía quedan algunas zonas públicas a las que acceder, pero la mayor parte pertenece a hoteles. Si no te alojas en ninguno de ellos, puedes pagar la entrada para disponer de ducha, piscina y acceso al Mar Muerto. Nosotros lo hicimos en el hotel Amman Beach y la verdad es que se agradece una ducha después de salir de este mar tan salado. También hay disponible un lugar donde hacen tratamientos con barro, pero hay que pagarlos, así como diferentes spas.
2. Desierto de Wadi Rum
Los desiertos son siempre paisajes peculiares y cada uno tiene su belleza particular. El de Wadi Rum no es una excepción y se caracteriza por tener montañas de roca principalmente rojizas. Pese a ser un desierto, hay un pequeño poblado cerca de la entrada y algo de vegetación, a nosotros nos llovió un poco durante la visita. Otra curiosidad, aquí se rodó parte de la película "Lawrence de Arabia" y todavía pueden verse los restos donde se escondió el auténtico Lawrence.
Desierto de Wadi Rum
La excursión suele hacerse en un 4x4, pero en algunos lugares se puede bajar y caminar por el desierto. Pueden encontrarse algunas dunas, desfiladeros, cañones, rocas en forma de arco y petroglifos dibujados por los nabateos. También hay muchos campamentos donde poder pasar la noche, algunos de ellos con el techo transparente para poder disfrutar de las estrellas. Para cenar cocinan verduras, hortalizas y carne bajo tierra durante horas, tuvimos la suerte de probarlo y estaba muy bueno. Pasar un día con los beduinos que viven y conocen la zona es una de las mejores experiencias que vivir en Jordania.
1. Petra
Sin lugar a duda la visita estrella de Jordania es la ciudad perdida de los nabateos, conocida como Petra. La ciudad rosa que estuvo perdida duranta varios siglos no es una de las 7 maravillas del mundo por casualidad. Fue construida hace más de 2.000 años por el pueblo nabateo y conquistada por los romanos a principios del siglo II. Era un punto clave en las rutas comerciales de la época, pero éstas se fueron perdiendo y la ciudad fue abandonada. En el año 1812, el arqueólogo Johann Ludwig Burckhardt engañó a los beduinos haciéndose pasar por un jeque árabe, de este modo consiguió que lo condujeran hasta Petra y así redescubrió para la humanidad la ciudad perdida de los nabateos.
Petra - El Monasterio
Solo se puede acceder por un desfiladero conocido como Siq, lo que hizo que permaneciera desaparecida durante siglos. Se crearon grandes templos, tumbas y salones reales excavados directamente en la roca, alrededor de una zona que abarca varios kilómetros. También quedan ruinas de otros edificios que fueron construidos, como era el gran palacio. Los mejores lugares que ver en Petra son el Tesoro, el monumento más emblemático, y el Monasterio, situado en el otro extremo de la ciudad. Hay mucho que ver y caminar, nuestra recomendación es visitarlo en dos días para poder recorrer toda la ciudad con tranquilidad y poder disfrutarla. También hay un espectáculo nocturno (Petra By Night), que quizá sea un poco caro para lo que es, pero que si se quiere hacer es mejor hacerlo la noche anterior a empezar a visitar Petra.
