Día 16 (14/04/2019) - Tel Aviv ➞ Barcelona
Carmel Market
Despertamos por última vez en Israel, era el último día de este viaje. Acabamos de recoger nuestras cosas y las dejamos a cargo de los dueños, para poder hacer el check-out y poder salir a hacer visitas sin cargar con las mochilas. Lo primero que hicimos fue ir al Carmel Market que habíamos querido visitar los días anteriores, pero nos había sido imposible porque cierran pronto.
Este mercado estaba cerca del Sapir Hostel. Cuando llegamos estaban abriendo y todavía había muchas tiendas cerradas. Entre las que estaban abiertas encontramos una gran variedad de alimentos como frutas, verduras, dulces, especias, carne y pescado, aunque también había tiendas donde vendían ropa, utensilios de cocina y hasta electrodomésticos.
Carmel Market
Carmel Market
En estas calles había varios bares y entramos en uno pequeño que parecía tranquilo. Pedimos un bocadillo de tortilla que venía acompañado de una ensalada y un café con leche para cada uno. Pagamos 72ILS por el desayuno que no nos pareció barato, pero como estaba muy bueno no nos supo mal pagarlo.
Cuando volvimos a la calle había más negocios abiertos y más gente que paseaba por el mercado. Mientras salíamos de estas calles fuimos viendo nuevas tiendas y algunas de ellas nos parecieron curiosas. Una de ellas tenía un gran surtido de halva, un dulce basado en pasta de sémola muy típico de la cocina de oriente medio.
Carmel Market
Jaffa
Para este último día de viaje habíamos planeado visitar la zona de Jaffa, un antiguo pueblo portuario que actualmente forma parte de Tel Aviv. Para llegar a esta zona de la ciudad fuimos hacia el paseo y a diferencia de los días anteriores nos dirigimos al sur. Justo delante de la playa había una gran zona verde por donde se puede pasear. Hacía mucho viento y bastante oleaje, aun así había mucha gente que había salido a dar una vuelta.
Paseo de Tel Aviv
Al llegar a Jaffa lo primero que encontramos fue la torre del reloj, uno de los monumentos más emblemáticos de este barrio y que data de 1903. Un poco más adelante giramos a la derecha y empezamos a subir por una cuesta pasando frente a una gran mezquita. Al llegar arriba pudimos disfrutar de una de las mejores vistas de Tel Aviv, viendo toda su costa y sus altos edificios.
Torre del reloj
Vistas desde Jaffa
En la zona alta del barrio encontramos la iglesia de San Pedro. Fue construida en 1654 sobre una ciudadela cruzada, pero el edificio fue derruido y el actual es de finales del siglo XIX. En la actualidad pertenece a los franciscanos de Tierra Santa. El interior está muy bien conservado y parece que sea totalmente nuevo, aunque no nos pareció una visita imprescindible.
Iglesia de San Pedro
Iglesia de San Pedro - Interior
Salimos y continuamos paseando por Jaffa. Llegamos al puerto que es uno de los más antiguos del mundo, pero solo pudimos verlo desde las alturas. Este lugar es una de las mayores fuentes de ingresos del barrio. Seguimos paseando por calles estrechas pero con mucho encanto. Eran antiguas pero estaban limpias y muy bien cuidadas.
Puerto de Jaffa
Jaffa
Desandamos el camino para volver a la plaza que hay junto a la iglesia. Encontramos la fuente del zodiaco, una fuente muy curiosa donde pueden verse estatuas que representan a los diferentes signos del zodiaco.
Fuente del zodiaco
Justo enfrente está la entrada a los Jardines HaPisgah y nos dispusimos a cruzarlo caminando. El parque tiene varias estatuas y esculturas que merecen la pena ver. En primer lugar vimos la Estatua de la Fe, un arco que representa tres escenas de la Biblia como son, el sueño de Jacob, el sacrificio de Isaac y la destrucción del muro de Jericó. Además, desde aquí puede verse toda la costa de Tel Aviv.
Jardines HaPisgah – Estatua de la Fe
Un poco más adelante se encuentra el Puente de los Deseos. En la barandilla pueden encontrarse doce dibujos, uno por cada signo del zodiaco. Hay que poner la mano encima de tu signo, pedir un deseo y cruzar el puente hasta una circunferencia con los signos del zodiaco, ponerse encima del correspondiente y repetirlo mirando al mar.
Jardines HaPisgah – Puente de los Deseos
Jardines HaPisgah – Signos del zodiaco
Acabamos de cruzar el parque y salimos por el otro extremo. Solo nos quedaba llegar hasta el mercado de Jaffa del que habíamos leído buenas referencias. El mercado es muy grande pero la mayoría de tiendas son de souvenires, ropa o antigüedades y no nos interesaban ninguno de estos productos. Dimos una vuelta recorriendo gran parte del mercado hasta que decidimos volver cerca del hotel.
Mercado de Jaffa
Mercado de Jaffa
Tel Aviv
Era mediodía y todavía teníamos tiempo de comer antes de irnos. Volvimos al Carmel Market a buscar un restaurante. Después de caminar unos pocos minutos acabamos entrando en el BarOchel, donde comimos una shakshuka y un pollo especiado con verduras. El ambiente del local era muy bueno así como la comida. Además, no era caro para ser Israel y pagamos en total 105ILS por la comida.
Comida - Shakshuka
Comida – Pollo especiado con verduras
Vuelta a casa
Pasamos por el Sapir Hostel a recoger nuestras mochilas y despedirnos de sus dueños. Tal como nos habían aconsejado, cogimos un taxi compartido que pasa junto a su guesthouse. Más que un taxi era un autobús pequeño pero más económico. Pagamos 6ILS cada uno para que nos llevasen a la estación de HaHagana.
Una vez en la estación quisimos pasar la barrera de control con nuestra tarjeta RavCav, pero no se abrieron las puertas. Tuvimos que hacer una cola de más de diez minutos para que en ventanilla nos solucionasen el problema. El trayecto costaba 13,5ILS y teníamos dinero suficiente en la tarjeta, pero tenían que registrarlo manualmente en la ventanilla. Con este contratiempo perdimos el margen que llevábamos y llegamos al andén apenas un par de minutos antes de que saliese el tren.
El trayecto hasta el aeropuerto es de tan solo unos veinte minutos. Al llegar tuvimos que sacar los billetes en unas máquinas y nos dirigimos a las ventanillas de facturación. La cola que había era bastante larga y perdimos más de media hora. Antes de acceder a las ventanillas, una persona de vigilancia del aeropuerto nos hizo unas preguntas sobre la relación que había entre nosotros, que habíamos hecho en Israel o si habíamos visitado algún otro país. Habíamos leído en varios blogs que el control puede durar mucho y que hacen muchas preguntas. En nuestro caso fueron solo unas pocas y bastante sencillas.
Habíamos seguido el consejo de otros blogs que decían que en este aeropuerto hay que estar mínimo tres horas antes. Suponemos que depende de la suerte que tenga cada uno, pero en nuestro caso no fue para tanto y nos sobró tiempo. Aprovechamos para merendar un croissant de chocolate y un café con leche que nos costaron 56ILS. Solo quedaba esperar a que llegara la hora para dirigirnos a la puerta de embarque y subir al avión que nos llevaría de vuelta directamente a Barcelona.
Llegaba el final de este increíble viaje. Habíamos pasado dos semanas visitando esta zona de oriente medio, recorriendo Jordania e Israel y también para ver y aprender un poco de los Territorios Palestinos. Dos semanas muy interesantes para conocer nuevas culturas y ver como dos países vecinos son a la vez tan diferentes. Pudios disfrutar de Petra, una de las 7 maravillas del mundo, ver el desierto de Wadi Rum, vivir la experiencia de bañarnos en el Mar Muerto y recorrer Jerusalén, una de las ciudades con más historia del Mundo. En resumen, un viaje muy completo tanto por visitas, como por historia y por gastronomía.
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