Día 9 (25/11/2021) - Fontevraud ➞ Montsoreau ➞ Turquant ➞ Saumur
Fontevraud
Despertamos en el parking autorizado para que las autocaravanas puedan hacer noche. Habíamos sido el único vehículo en este parking durante la noche. El centro del pueblo quedaba algo lejos y decidimos movernos más cerca para hacer la visita. Antes de salir desayunamos y vaciamos las aguas sucias de la autocaravana. En pocos minutos estábamos aparcados cerca de la primera visita del día. Lo primero fue acercarnos hasta la plaza del pueblo, donde vimos que no había nadie por la calle.
Fontevraud
Justo al lado de la plaza estaba el acceso a la abadía de Fontevraud, el motivo por el cual habíamos venido hasta este pueblo. Llegamos a las taquillas, donde también estaba la tienda de souvenires, pagamos en total 22€ para poder acceder a la abadía. Cruzamos la entrada al recinto y lo primero que vimos fue la iglesia. El conjunto que conformaba la abadía era impresionante y empezaron a aumentar las ganas de hacer esta visita. La abadía fue fundada a principios del siglo XII por el predicador Robert de Arbrissel.
Abadía de Fontevraud - Iglesia
Abadía de Fontevraud
Lo primero que hicimos fue entrar en la iglesia, el primer edificio que habíamos visto y nos había llamado la atención. Vimos que el interior era muy sencillo, aunque la arquitectura era impresionante. Había pocos detalles decorativos. En una de las alas vimos unas tumbas donde se veía la imagen supuestamente de Enrique II de Inglaterra y su esposa, que junto a su hijo Ricardo Corazón de León fueron enterrados en esta abadía.
Abadía de Fontevraud – Interior de la iglesia
Abadía de Fontevraud – Interior de la iglesia
Continuamos la visita recorriendo el claustro de la abadía. Los edificios de abadías y monasterios siempre nos gustan mucho, y en esta ocasión no fue una excepción. Como habíamos visto en varios castillos, los arbustos estaban bien recortados y verdes, mientras que el resto de plantas no estaban en su mejor momento. Disfrutamos de esta parte del recinto, donde los monjes pasaban sus horas de descanso para pasear y tomar el aire.
Abadía de Fontevraud - Claustro
Abadía de Fontevraud - Claustro
Alrededor del claustro hay varias habitaciones y muchas de ellas se pueden visitar. Entramos en todas las posibles y descubrimos algunos frescos pintados en la pared. La mayoría de las salas estaban prácticamente vacías, aunque en algunas de ellas estaban empezando a preparar decoraciones navideñas.
Abadía de Fontevraud
Abadía de Fontevraud
Salimos por el otro extremo del claustro y bordeamos el edifico. Llegamos hasta una parte que nos había llamado la atención desde el principio. Era un pequeño anexo al edificio principal, aunque era completamente de color blanco y acabado en punta. Entramos y descubrimos que eran las antiguas cocinas de la abadía. Las puntas que habíamos visto desde fuera eran chimeneas para que saliera el humo mientras cocinaban.
Abadía de Fontevraud - Cocina
Seguimos la visita recorriendo algunas habitaciones que había en el segundo piso, pero no había nada interesante. Empezamos el camino hacia la salida, dando la vuelta por detrás del edificio principal. Descubrimos que había otras habitaciones donde había maquetas de la abadía de diferentes épocas de la historia. Esto no ayudó a entender la evolución que había tenido el edificio desde que se fundó en el siglo XII. Finalmente, antes de abandonar la abadía vimos la parte de atrás del edificio, que no era tan homogénea como la parte delantera. En resumen, podemos decir que la visita nos gustó más de lo que esperábamos y volvimos a la autocaravana con la sensación de empezar bien el día.
Abadía de Fontevraud - Maqueta
Abadía de Fontevraud
Montsoreau
Cuando abandonamos la abadía era temprano y decidimos llegar hasta el siguiente pueblo antes de comer. En apenas diez minutos llegamos a Montsoreau y aparcamos junto al río. Cerca estaba la place du Mail, donde vimos que había algunos locales. Después de una pequeña vuelta nos decidimos por entrar en el restaurante Le petit bar Montsoreau. Tenían un menú que no estaba nada mal y que junto con la bebida y el café nos costó en total 42€.
Comida en Le petit bar Montsoreau
El motivo por el cual paramos en este pueblo era ver su castillo. Después de comer nos acercamos hasta el edificio que estaba en lo alto de una pequeña colina. En esta ocasión no teníamos intención de acceder al interior del castillo, sin embargo pudimos rodearlo y verlo desde diferentes ángulos. Habíamos visto muchos castillos en los últimos días y el de Montsoreau no nos sorprendió demasiado. Cuando acabamos de rodear el edificio volvimos a la autocaravana para continuar con las visitas de hoy.
Castillo de Montsoreau
Castillo de Montsoreau
Turquant
La última parada de hoy era para visitar el pueblo de Turquant. En esta ocasión el motivo no era ver ningún castillo sino que queríamos conocer las casas trogloditas de este pueblo. Aparcamos en una zona habilitada para autocaravanas justo a la entrada del pueblo, muy cerca de una pequeña iglesia. El camino no estaba muy bien indicado, pero después de dar un par de vueltas encontramos algunas de las casas trogloditas. Se trata de unas casas que crearon utilizando pequeñas cuevas en la roca. No pudimos entrar en ninguna, pero pudimos ver algunas fachadas con las que habían cubierto la entrada, dejando una puerta y algunas ventanas en la fachada frontal, y única, de la casa.
Turquant – Casas trogloditas
Turquant – Casas trogloditas
Seguimos paseando por una de las calles de Turquant para conocer un poco más el pueblo. Por el camino nos encontramos unas curiosas esculturas con forma de animales como hormigas o pájaros, hechas con viejos cubiertos y piezas de coche. Caminamos hasta que llegamos a una zona donde se acababan las casas y encontramos un molino rojo. Aquí pensamos que estábamos saliendo del pueblo y no tenía sentido continuar. Volvimos de nuevo a la autocaravana mientras comentábamos que la visita a este pueblo nos había decepcionado un poco. La verdad es que esperábamos algo más de las casas trogloditas.
Turquant
Turquant
Saumur
Acabamos el día de hoy llegando hasta el pueblo de Saumur. Aprovechamos que unos días atrás habíamos comprado la tarjeta del camping-car park y nos detuvimos en uno que hay a las afueras del pueblo para hacer noche. A diferencia de otros lugares donde habíamos hecho noche, en este parking había varias autocaravanas y tenían algunos servicios como agua para rellenar los depósitos y electricidad. Como en muchos de los días del viaje, tuvimos tiempo para descansar, cocinar y jugar con Liam. También aprovechamos para no ir a dormir demasiado tarde.
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