Día 3 (24/02/2012) - Roma ➞ Ciudad del Vaticano ➞ Roma
Ciudad del Vaticano
Nos despertamos pronto y bajamos a tomar el desayuno. Para hoy teníamos planificado visitar Ciudad del Vaticano, el país más pequeño del mundo y que está dentro de la ciudad de Roma. La Ciudad del Vaticano está dirigida por el papa y tiene menos de 1.000 habitantes, todos hombres. Queríamos aprovechar nuestra visita a Roma para visitar este otro país y así ver dos países en un solo viaje. Tomamos el desayuno y nos fuimos directos a este minúsculo territorio de apenas 0,44 Km2 de superficie.
Museos Vaticanos
Empezamos nuestra visita a este pequeño país por los Museos Vaticanos. Éstos son un conjunto de galerías que contienen objetos de valor artístico y son propiedad de la Iglesia. En estas galerías hay una colección muy extensa y variada, obviamente solo una pequeña parte de lo que tienen en el Vaticano está a la vista de los turistas. Estos museos tienen su origen a principios del siglo XVI, cuando Julio II trasladó su colección al patio de Belvedere. Después de esto se construyeron nuevos edificios y pasadizos para unir los ya existentes y formar así un conjunto de galerías. De esta manera se llegaron a formar los actuales museos que fueron pasando por las manos de los diferentes papas.
Pagamos la entrada de 17€ por persona y empezamos nuestro recorrido por el museo gregoriano egipcio. En estas primeras galerías vimos montones de figuras que provenían del antiguo Egipto. Había desde pequeñas figuras hasta otras bastante grandes. En estas estancias también pudimos ver papiros, jeroglíficos escritos en piedra y sarcófagos.
Museos Vaticanos - Escultura egipcia
Seguimos el recorrido y llegamos a otras salas donde encontramos estatuas de la época griega. En estas estancias había muchas figuras, gran parte de ellas eran dedicadas a los muchos dioses que tenían los griegos.
Museos Vaticanos - Escultura griega
A continuación pasamos a unas galerías con el nombre de museo Chiaramonti. El fundador de esta parte de los Museos Vaticanos fue Pio VII. De estas galerías nos gustó mucho un enorme pasillo lleno de esculturas situadas a ambos lados. Estaban representados antiguos emperadores romanos, deidades y antiguos papas.
Museos Vaticanos - Museo Chiaramonti
Después de recorrer este enorme pasillo y detenernos a hacer fotos a gran número de esculturas, salimos al patio de la Piña. Este es un patio interior rodeado por los edificios que forman las galerías que estábamos visitando. Nos llamó mucho la atención una obra que estaba en el centro del patio, una especie de esfera dorada con una gran brecha, donde se veía que en el interior había otra esfera dorada más pequeña.
Museos Vaticanos - Patio de la Piña
Proseguimos con nuestra visita a este gran museo y volvimos a adentrarnos en sus galerías. Las siguientes estancias que visitamos contenían esculturas de arte romano. Más adelante pasamos por estancias llenas de objetos de la antigua Roma.
Museos Vaticanos
A continuación llegamos a un gran pasillo que nos gustó mucho. Éste estaba completamente decorado por todas partes. Tanto el techo como las paredes estaban pintados sin dejar ningún hueco libre. Lo que más nos llamó la atención fueron las grandes pinturas que había en las paredes. En éstas pudimos ver diferentes mapas de los dominios que había tenido la Roma imperial.
Museos Vaticanos
Habíamos visitado unas cuantas galerías, pero ahora llegábamos a las que más nos gustaron. En primer lugar recorrimos las Estancias de Rafael. En total son cuatro las que pintó Rafael para el papa Julio II entre 1508 y 1524, Rafael murió en 1520 y sus ayudantes finalizaron el trabajo. Las 4 estancias son la estancia de la Signatura, donde se encuentran frescos como "La disputa del Sacramento", la estancia del Heliodoro con frescos como "La expulsión de Heliodoro del templo", la estancia del Incendio del Borgo con frescos como "Coronación de Carlomagno" y la estancia de Constantino con frescos como "Bautismo de Constantino".
Estancias de Rafael - La disputa del Sacramento
Pasadas estas cuatro estancias llegamos a la sala más famosa de los Museos Vaticanos, la Capilla Sixtina. Como es mundialmente conocido, la Capilla Sixtina fue pintada por el artista Miguel Ángel. Fue Sixto IV, de aquí proviene el nombre de la capilla, quien encargó a Miguel Ángel que pintara esta sala en el siglo XV. En esta estancia no estaba permitido hacer fotos, pero vimos que todo el mundo sacaba alguna, no quisimos ser menos y sacamos algunas disimuladamente. En el techo hay representadas nueve escenas sobre la creación y la caída del hombre. Entre éstas se encuentra la famosa "La creación de Adán" donde el Creador está a punto de darle la vida a Adán. Sobre el altar había un gran fresco que representaba el Juicio Final.
Capilla Sixtina - La creación de Adán
Estábamos llegando al final de nuestro recorrido por estos museos, pero todavía pasaríamos por sus últimas salas. Primero pasamos por el museo filatélico y numismático, donde pudimos ver gran cantidad de monedas de incalculable valor.
Museos Vaticanos - Museo filatélico y numismático
Por último, pasamos por la pinacoteca, donde vimos un gran número de obras de arte de gran valor. En general el museo nos había gustado, había grandes obras de arte y la Capilla Sixtina es espectacular. Pero pensar que la Iglesia Católica tiene todas estas y muchas más pertenencias y riquezas, mientras montones de niños se mueren de hambre, hizo si más no, dejar de tener menos fe en la religión.
Museos Vaticanos - Pinacoteca
Comida
Los Museos Vaticanos son muy grandes y habíamos estado toda la mañana recorriendo sus estancias. Decidimos que antes de dirigirnos a ver la Basílica de San Pedro iríamos a comer algo. Por los alrededores del Vaticano, así como en muchos lugares de Roma, hay locales que venden pizza al taglio. Nos acercamos a uno de estos locales y pedimos algunas porciones variadas para probar varios tipos. Pese a que era pizza para llevar fue una de las mejores que habíamos comido nunca y solo por unos 10€ en total.
Plaza de San Pedro
Después de comer nos dispusimos a continuar nuestro recorrido por la Ciudad del Vaticano. Fuimos a la Plaza de San Pedro, donde también está ubicada la Basílica de San Pedro. Este país es tan pequeño, que el espacio ocupado por la plaza y la basílica constituye el 20% de la superficie total del país. Esta plaza tiene forma rectangular, pero la parte central se ensancha con una forma circular. La Plaza de San Pedro fue diseñada por Bernini, otra vez el artista italiano que había diseñado montones de esculturas, plazas y fuentes en la ciudad romana, a mediados del siglo XVII. Nada más llegar a la plaza pudimos ver al fondo la fachada principal de la Basílica de San Pedro.
Plaza de San Pedro
Plaza de San Pedro
En el centro de la plaza se erige un obelisco traído de Egipto y que mide 25 metros de altura. Todo el borde de la plaza está formado por varias filas de columnas. Es muy curioso que si te colocas cerca del obelisco y miras en cualquier dirección las columnas que están a la misma altura queden alineadas y parece que hay una única fila de columnas. En las columnas del lado derecho había una cola inmensa para poder acceder a la basílica y nos pusimos al final para poder acceder. Mientras íbamos avanzando pudimos seguir observando la plaza y hacer fotos de esta.
Plaza de San Pedro - Vista de las columnas desde el centro de la plaza
Plaza de San Pedro
Basílica de San Pedro
Finalmente, llegó nuestro turno de entrar a la Basílica de San Pedro. Ésta es la iglesia cristiana más grande del mundo con 193 metros de longitud y 44,5 metros de altura. La basílica empezó a edificarse en el año 1506 y se finalizó en el año 1626. Trabajaron en su construcción arquitectos tan importantes como Donato Bramante, Miguel Ángel o Bernini. Aquí es donde descansa san Pedro, el que fuera uno de los doce apóstoles de Jesús y el primer papa de la historia. La mayoría de los papas que le sucedieron fueron enterrados también en esta iglesia.
En el cristianismo hay 4 basílicas mayores, la Basílica de San Pedro, la Archibasílica de San Juan de Letrán, la Basílica de Santa María la Mayor y la Basílica de San Pablo de Extramuros. Aunque parezca mentira, la Basílica de San Pedro no es ni la sede oficial del papa ni la basílica principal de Roma, ese puesto lo ocupa la Archibasílica de San Juan de Letrán. Tampoco es la principal iglesia de la Ciudad del Vaticano, porque ese puesto lo ostenta la Capilla Paulina. Sin embargo es la principal iglesia pontificada ya que en ella se celebran la mayoría de ceremonias papales.
Una vez en el interior recorrimos este espacio con gran admiración. La arquitectura de este edificio es espectacular y sus acabados en mármol nos llamarón mucho la atención. En todo el recinto interior de la basílica hay varias esculturas, entre ellas "La Pietà" de Miguel Ángel. fuimos deteniéndonos frente a todas ellas para sacarnos algunas fotos. El recorrido por el interior de esta gran iglesia nos llevó cerca de una hora.
Basílica de San Pedro
Basílica de San Pedro - La Pietà de Miguel Ángel
En una de las paredes encontramos una gran placa de mármol donde estaban inscritos todos y cada uno de los nombres de los papas de la historia y su año de defunción. Visitar esta basílica es, claramente, una visita obligada si se visita la ciudad de Roma, a nosotros nos gustó muchísimo.
Basílica de San Pedro - Lista de los papas de la Iglesia católica
Antes de abandonar definitivamente la basílica, nos dirigimos al acceso que hay para subir a la cúpula. Aquí vimos que teníamos dos opciones para poder subir hasta arriba, la primera opción era subir la primera parte del trayecto en ascensor y la segunda subir desde el principio por las escaleras. La cola para subir por el ascensor era bastante larga y costaba 8€, mientras que hacerlo por las escaleras eran 6€ y sin hacer cola. No lo dudamos y subimos por las escaleras.
En total la cúpula de la Basílica de San Pedro se eleva 136,57 metros y fue cansado subir todas sus escaleras hasta llegar a la cima. Sobre todo el último tramo donde hay que subir una escalera de caracol, donde en vez de barandilla había una cuerda que caía del techo. Las vistas que hay desde la cima valen el esfuerzo del ascenso por las escaleras. Desde esta parte de la basílica pudimos contemplar la Plaza de San Pedro en su totalidad, con la ciudad de Roma al fondo. También pudimos observar otras partes de la Ciudad del Vaticano que no íbamos a visitar, como unos bonitos jardines que vimos desde las alturas. Pasamos unos minutos disfrutando de estas vistas antes de volver a bajar.
Vistas desde la cúpula de la Basílica de San Pedro
Vistas desde la cúpula de la Basílica de San Pedro
Castel Sant'Angelo
Al salir de la Basílica de San Pedro abandonamos Ciudad del Vaticano para volver a la ciudad de Roma. Cerca del vaticano se encuentra Castel Sant'Angelo, también conocido como Mausoleo de Adriano. Este edificio fue mandado construir por el emperador Adriano para que fuese su mausoleo personal en el año 135, pero fue Antonino Pío en el año 139 quien lo finalizó.
El edificio cambió sus funciones al poco tiempo de ser construido y se convirtió en un edificio militar. El actual nombre del castillo proviene porque en el año 590, tras una epidemia de peste que hubo en Roma, el papa Gregorio I dijo que vio al Arcángel San Miguel sobre el castillo, indicando de esta manera que la epidemia llegaba a su fin. Este es el motivo del nombre del castillo, pero además, es la razón por la cual en la cima del castillo hay una estatua de San Miguel Arcángel.
No llegamos a entrar en el castillo, pero paseamos por los alrededores aprovechando para sacarnos unas cuantas fotos. De cerca, el castillo parece más grande de lo que habíamos imaginado y tiene una arquitectura bastante particular, ya que es un gran edificio de forma circular.
Castel Sant'Angelo
Castel Sant'Angelo
Después de recorrer los alrededores del castillo nos dirigimos a cruzar el puente de Sant'Angelo. Fue más o menos al mismo tiempo que el castillo y sirve para cruzar el río Tíber. Cuando se construyó el castillo, la ciudad de Roma no se extendía a este lado del río y Adriano lo mando construir para unir la ciudad de Roma a su mausoleo. El puente es de uso peatonal y a ambos lados pudimos ver unas cuantas esculturas. Cuando casi habíamos cruzado, nos dimos la vuelta y obtuvimos una bonita vista del conjunto puente y castillo.
Puente de Sant'Angelo
Castel Sant'Angelo
Panteón de Agripa
A continuación nos dirigimos al Panteón de Roma, también conocido como Panteón de Agripa. El templo en realidad fue mandado construir por Adriano en el año 118. Su nombre se debe a que está edificado sobre un templo erigido por Agripa en el año 27 a.c. y que fue destruido por un incendio en el año 80.
Cuando llegamos apenas faltaban unos 10 minutos para las 5 de la tarde, hora en la que cierran las puertas del Panteón. Accedimos para ver un poco su interior, pero había mucha gente y apenas pudimos ver una pequeña parte y sacar un par de fotografías. Salimos del edificio y pensamos que lo mejor sería volver al día siguiente por la mañana para hacer una visita más completa. Aprovechamos que no teníamos ninguna visita más planificada para hoy para tomar un buen café italiano.
Panteón de Agripa
Panteón de Agripa
Fontana di Trevi
Todavía quedaban algunos minutos de luz, así que, pensamos que sería buena idea pasar por la Fontana di Trevi y poder verla de día. Hasta ahora habíamos pasado varias veces por la fuente y todas ellas de noche. Con las luces artificiales quizá sea más espectacular, pero para las fotos es mejor la luz del día.
En esta ocasión no había tanta gente como las otras veces que habíamos pasado por la fuente y pensamos en sacarnos una foto tirando una moneda al agua. No creemos en estas cosas por eso nos hicimos la foto tirando una moneda de 5 céntimos de euro. Habíamos estado todo el día caminando y apenas nos habíamos sentado en la calle para comer la pizza al taglio, de modo que, fuimos al hotel a descansar un poco antes de salir de nuevo para ir a cenar.
Fontana di Trevi
Fontana di Trevi
Trastévere
Al salir del hotel fuimos, como la noche anterior, al barrio del Trastévere. El nombre de este barrio proviene de "Trans Tíber", porque hay que cruzar el río Tíber desde el centro de la ciudad para llegar hasta este barrio. Tiene un estilo muy acogedor con sus estrechas calles adoquinadas y la gran cantidad de locales que hay en sus calles. Como ya hicimos la noche anterior, paseamos cerca del río desde barrio que tanto nos estaba gustando.
Trastévere - Río Tíber
Durante nuestro paseo pasamos por delante de la Basílica de Santa María in Trastévere, ya habíamos entrado en varias iglesias y todavía nos quedaría entrar en alguna más, así que descartamos entrar en la basílica. También pasamos por una plaza que, como muchas en Roma, tenía una bonita fuente en el centro.
Trastévere - Basílica de Santa María in Trastévere
Trastévere
Cuando llegó la hora de cenar escogimos uno de los muchos restaurantes de la zona y entramos en el Ivo a Trastévere. En los últimos dos días habíamos comido bastante pizza y pasta así que decidimos cambiar un poco. Nos pedimos un plato con un tipo de salchicha con salsa de tomate y patatas y otro plato de lomo cubierto por jamón y queso. La cena estaba bastante buena, aunque hay que reconocer que claramente su especialidad son las pizzas y la pasta. Solo nos quedaba volver paseando hasta el hotel y prepararnos para nuestro último día en Roma.
Cena
Cena
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